- «Ama a tus padres si son justos; si no lo son, sopórtalos»..[1]
- «Acostumbrarse a la felicidad lleva a la infelicidad».[2]
- «Amistad que termina, nunca había comenzado».[3]
- «En mar tranquila todos son buenos pilotos».[4]
- «Entre la astucia y la desconfianza siempre hay guerra».[5]
- «Es más cruel temer a la muerte que morir». [«El temor a la muerte es peor que la muerte misma».][6]
- «Está a salvo de cualquier peligro aquel que, aún estando seguro, se mantiene en guardia».[7]
- «El hombre que no sabe callar tampoco sabe hablar».[8]
- «El dinero es tu esclavo si sabes emplearlo; tu amo, si no sabes».[9]
- «El que es temido por muchos, debe temer a muchos».[10]
- «Es la voluntad y no el cuerpo lo que nos hace lujuriosos».[11]
- «Gana dos veces aquél que en la victoria se gana a sí mismo» [Bis vincit, qui se vincit in victoria].[12]
- «Generalmente, la felicidad tiene un oído duro».[13]
- «La taciturnidad de un hombre necio a menudo es considerada sabiduría».[16]
- «Quien solo vive para sí, está muerto para los demás».[17]
- «Un compañero alegre te sirve en el viaje casi de vehículo».[20]
- «Un solo hombre ingrato perjudica a todos los que sufren».[21]
- ↑ Señor (1997), p. 222.
- ↑ Señor (1997), p. 232.
- ↑ Palomo (2013), p. 136.
- ↑ Ortega (2013), p. 1671.
- ↑ Ortega (2013), p. 1990.
- ↑ Ortega (2013), p. 2750.
- ↑ Ortega (2013), p. ¿?.
- ↑ Palomo Triguero (1997), p. 57.
- ↑ Señor (1997), p. 152-3.
- ↑ Palomo (2013), p. 273.
- ↑ Ortega (2013), p. 1032.
- ↑ Zanoner, Ángela María. Frases latinas. Editorial Parkstone International, 2016. ISBN 9781683252528.
- ↑ Ortega (2013), p. 1791.
- ↑ Ortega (2013), p. ?.
- ↑ Palomo (2013), p. 241.
- ↑ Señor (1997), p. 423.
- ↑ Palomo (2013), p. 298.
- ↑ Palomo (2013), p.168 .
- ↑ Palomo (2013), p. 289.
- ↑ Señor (1997), p. 16.
- ↑ Ortega (2013), p. 2284.
- Señor, Luis (1ª ed. 1997 / 2017). Diccionario de citas. Espasa Calpe. ISBN 8423992543.