En el transcurso de este siglo, todos los territorios circundantes al mar Mediterráneo quedaron bajo el control de Roma, siendo dirigidos directamente por gobernadores romanos, o a través de reyes vasallos nombrados por Roma. El Estado romano atravesó una época de crueles guerras civiles, que finalizaron con un retroceso político: la disolución de la Antigua república romana, tras unos 500años de existencia, y la concentración de todo el poder del Estado en un solo hombre, el emperador, originándose así el Imperio romano, uno de los más importantes (sino el más importante) de la historia occidental.
La turbulencia interna que asoló Roma en este tiempo puede ser vista como las últimas convulsiones antes de la final muerte de la Antigua república romana, que finalmente tomó el camino del gobierno autocrático de hombres poderosos como Julio César, Marco Antonio y Octavio. A finales de este siglo se estima que habría nacido Jesús de Nazaret, la figura central del cristianismo.
Mientras tanto, en Asia, el Imperio Chino de los Han continúa floreciendo. Los chinos establecen la hegemonía en la región tras los enfrentamientos con los nómadas Xiongnu, quienes terminan (temporalmente) sometidos a finales del siglo.
Romanos y griegos hacen uso de la rueda hidráulica, que aprovecha la energía de las corrientes de agua para mover las muelas de los molinos de cereales.[1]
90 al 89 a.C.: Se le concede la ciudadanía romana a todos los aliados de Roma.[1]
73 al 71 a.C.: Espartaco, esclavo y gladiador romano, lidera una rebelión de esclavos, siervos y proletarios. Reunió más de 70.000 partidarios y derrotó en tres ocasiones al ejército romano. En 71, el general Marco Craso derrotó a los rebeldes, mató a su jefe y crucificó a más de 6.000 esclavos.[1]
65 al 8 a.C.: Vida del poeta romano Horacio, autor de las Odas, colección de poemas que celebran la paz, la amistad, el vino y la sencillez.[1]
58 al 51 a.C.: César asume el mando sobre las Galias (territorio que corresponde aproximadamente a Francia), somete a los pueblos galos y extiende las fronteras del Imperio romano hasta el Rin.[1]
53 al 52 a.C.: Durante una campaña contra los partos muere Craso. Para contrarrestar las aspiraciones unipersonales de César, el Senado reconoce a Pompeyo como único cónsul.[1]
49 al 48 a.C.: César invade Italia con sus legiones y desencadena la guerra civil. Derrota a Pompeyo, que huye a Egipto, donde es asesinado por orden del faraón. César llega a Egipto e interviene en la sucesión dinástica en favor de Cleopatra VII, quien recupera el poder. Cleopatra y Julio César se hacen amantes.[1]
43 a.C. al 17: Vida de Ovidio, autor de Metamorfosis, obra épica en la que relata, con un claro componente erótico, leyendas mitológicas. Entre sus obras líricas se encuentran Amores y El arte de amar.[1]
30 a. C.: Fin del Antiguo Egipto. La muerte de Cleopatra marca el fin de más de 3000 años de historia egipcia, la cual desde este momento quedará bajo control completo de fuerzas e imperios extranjeros (hasta la fundación de la República Egipcia en el año 1953)
Construcción de la ciudad de Teotihuacán. Se convertirá en el principal centro de poder del valle de México y mantendrá una posición hegemónica hasta el siglo VI. Sus principales construcciones tienen carácter sagrado, como las grandes pirámides del Sol y de la Luna.[1]
Cultura
27 al 19 a.C.: El poeta latino Virgilio escribe, por encargo del emperador Augusto, la Eneida, un poema épico que exalta la fundación de Roma. Es una de las obras maestras de la literatura.[1]