«El paraíso terrenal no terminó cuando Adán y Eva supieron que trabajarían con sudor y parirían con dolor. Terminó el día en que repararon en la existencia de un amo que les prohibía comer una manzana».[6]
«—Harun-al-Rashid, dijo Mahoma, tendrás setenta pabellones. Está escrito. Pero el sueño, la prisa, el miedo y la limosna los traerás a tu espalda al Paraíso».[7]
«La infancia termina cuando con la llegada del uso de razón el niño percibe que sus padres no son inmortales. Esa es la verdadera expulsión del paraíso, el final de la inocencia, el presentimiento de la muerte».[9]
Correas, Gonzalo (1906). Vocabulario de refranes y frases proverbiales y otras formulas comunes de la lengua castellana en que van todos los impresos antes y otra gran copia. Facsimil en línea.
Goicoechea, Cesáreo (1952). Diccionario de citas. Labor.
Orbaneja, Eduardo (1998). El saber del pueblo. Establecimiento tipográfico de J. Pastor, Valladolid, 1890. CIE. ISBN8493001643.
Ortega, Arturo (2013). El gran libro de las frases célebres. Penguin Random House Grupo Editorial, México. ISBN 6073116314, 9786073116312.