- «A cada uno su verdad».[1]
- «Cualquiera puede ser heroico de vez en cuando. Lo cual no es fácil».[2]
- «El mal se puede hacer a todos y cada uno puede hacerlo; el bien sólo a quienes lo necesitan».[3]
- «En los objetos, amamos lo que de nosotros mismos hemos puesto en ellos».
[Nel-l'ggetto amiamo que che vi mettiamo di noi].[4]
- «La mujer es más generosa que el hombre y no se deja cautivar solamente por la belleza exterior».[6]
- «Las mujeres, al igual que los sueños, nunca son como las has imaginado».[7]
- «La vida es menos real que el arte. Pero el arte es en sí realidad, fiera del tiempo, del azar y de los obstáculos, sin otro fin que sí mismo. El arte venga la vida».[8]
- «Puesto que reconocemos que errar es humano, ¿no resulta una crueldad sobrehumana la administración de la justicia?».[9]
- «Siempre sentimos la necesidad de culpar a otros de nuestros daños y desventuras».[10][11]
- «Soy un ser distinto para cada persona que me conoce. Lo sé, lo veo. Y nada me embaraza tanto como estar a la vez con otros para quienes sé que soy un tipo distinto».[12][13]
- «Todos vivimos con la ilusión de que los demás, desde fuera, no vean como nosotros imaginamos ser, desde dentro. Y no es así».[14]
- «Yo no vivo mi vida, la escribo».[15]
- 1 2 Señor (1997), p. 552.
- ↑ De Il piacere dell'onestà (1917). Stanley, Hochman (1984). McGraw-Hill Encyclopedia of World Drama. CreateSpace Independent Publishing Platform. p. ¿?. ISBN 0070791694.
- ↑ Bartra (1994), p. 242.
- ↑ Goicoechea (1995), p. 81. Il fu Mattia Pascal, IX.
- ↑ Señor (1997), p. 378.
- ↑ Bartra (1994), p. 242.
- ↑ Goicoechea (1995), p. 455. De Ciascuno a suo modo, I.
- ↑ Bartra (1994), p. 242.
- ↑ Goicoechea (1995), p. 361. Il fu Mattia Pascal, XI.
- ↑ Ortega (2013), p. 1046.
- ↑ Bartra (1994), p. 242.
- ↑ Bartra (1994), p. 242.
- ↑ Ortega (2013), p. 3844.
- ↑ Bartra (1994), p. 242.
- ↑ Bartra (1994), p. 242.