Relaciones Cuba-Venezuela
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Las relaciones Cuba-Venezuela se refiere a las relaciones bilaterales entre Cuba y Venezuela.
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En noviembre de 1961, el presidente venezolano Rómulo Betancourt rompió relaciones con Cuba siguiendo la política de la doctrina Betancourt, que consistía en no relaciones diplomáticas con los gobiernos que habían llegado al poder por medios no electorales.[1] En enero de 1962 Venezuela votó para expulsar a Cuba de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y en julio de 1964 solicitó con éxito que las sanciones de la OEA fueran impuestas a Cuba después del descubrimiento de un cargamento de armas en una playa venezolana, supuestamente abandonado por cubanos para uso de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN).
En mayo de 1967 ocurrió el desembarco de Machurucuto, donde el ejército venezolano frustró una invasión de oficiales cubanos y guerrilleros venezolanos.[2]
A partir de 1969 inicia un acercamiento tentativo entre ambos países durante la presidencia Rafael Caldera, y en 1974 las relaciones fueron reanudadas durante el gobierno de Carlos Andrés Pérez, junto con las entregas de petróleo, y Venezuela abogó por la readmisión de Cuba a la OEA. Las tensiones resurgieron en 1977 después del atentado del Vuelo 455 de Cubana de Aviación y luego de que cubanos buscaron refugio en la embajada venezolana de La Habana en 1980.[3]
En 1999 la relación bilateral mejoró significativamente durante la presidencia de Hugo Chávez. Aunque durante su candidatura presidencial denominó a Cuba una dictadura, formó una importante alianza con Fidel Castro y una relación comercial significativa con Cuba desde su elección en 1999. La cálida relación entre ambos países continuó intensificándose.[4] Hugo Chávez describió a Castro como su mentor[5] y durante su presidencia se refirió al régimen cubano como una "democracia revolucionaria".[6] La relación bilateral incluye la ayuda al desarrollo, las empresas conjuntas, las grandes transacciones financieras, el intercambio de recursos energéticos y la tecnología de la información, y la cooperación en los campos de los servicios de inteligencia y militares.
Una característica de las relaciones entre Cuba y Venezuela es que ambas naciones están intercambiando activos entre sí, que son baratas para el país emisor pero de gran importancia para el país receptor.[7]