Inteligencia artificial generativa
modelo de inteligencia artificial capaz de generar contenido en respuesta a un prompt / De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
La inteligencia artificial generativa o IA generativa es un tipo de sistema de inteligencia artificial (IA) capaz de generar texto, imágenes u otros medios en respuesta a comandos.[1][2] Los modelos de IA generativa aprenden los patrones y la estructura de sus datos de entrenamiento de entrada y luego generan nuevos datos que tienen características similares.[3][4]
Los sistemas de IA generativa notables incluyen ChatGPT (y su variante Microsoft Copilot), un bot conversacional creado por OpenAI usando sus modelos de lenguaje grande fundacionales GPT-3 y GPT-4;[5] y Bard, un bot conversacional creado por Google usando Gemini. Otros modelos generativos de IA incluyen sistemas de arte de inteligencia artificial como Stable Diffusion, Midjourney y DALL-E.[6]
En su origen, la IA generativa surgió con el propósito de simular los procesos de pensamiento humano. Hoy en día, IA generativa tiene aplicaciones potenciales en una amplia gama de industrias, que incluyen el arte, la escritura, el desarrollo de software, el diseño de productos, la atención médica, las finanzas, los juegos, el marketing y la moda.[7][8][9] La inversión en IA generativa aumentó a principios de la década de 2020, con grandes empresas como Microsoft, Google y Baidu, así como numerosas empresas más pequeñas que desarrollan modelos de IA generativa.[1][10][11]
La IA generativa persigue el desarrollo de la alfabetización y las competencias en IA por parte de la ciudadanía[12]. La UNESCO pretende alcanzar un enfoque centrado en el ser humano, basado en principios de inclusión y equidad, garantizando un «AI for all» en términos de innovación y conocimiento[13][14]. En este sentido, uno de los desafíos más importantes es garantizar que la IA sea diseñada y utilizada de manera ética y responsable
Sin embargo, también existen preocupaciones sobre el posible uso indebido de la IA generativa, como la creación de noticias falsas o deepfakes, que pueden usarse para engañar o manipular a las personas.[15][16]La IA toma información de diferentes fuentes y las une, no se valida la cientificidad de la información tomada. Permite interactuar de forma diferente con un buscador web o con un manual escolar, hay que tener en cuenta que la IA es una fuente más de información generada en un ecosistema virtual.[17]En este mismo sentido, en septiembre de 2023, la UNESCO ha emitido una llamada urgente a los gobiernos de todo el mundo para que regulen de manera eficaz la IA generativa en el ámbito educativo.[18]