Gálibo ferroviario
De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
Un gálibo ferroviario especifica las dimensiones máximas del material rodante y de sus cargas (y en particular, de su sección transversal con respecto a la vía) para garantizar que los trenes puedan pasar de manera segura a través de los túneles y por debajo de los puentes, y mantenerse suficientemente alejados de los elementos adyacentes a la plataforma y de los otros trenes.[1][2] De forma análoga, un gálibo ferroviario también puede establecer el espacio mínimo libre de obstáculos del que se debe disponer alrededor de una vía para que un determinado tipo de tren pueda circular por la misma con las debidas condiciones de seguridad. Es habitual que adopten valores particulares en cada país (producto de una solución de compromiso entre las características de sus propias infraestructuras y las de los trenes que las recorren)[3] y pueden variar en una red incluso si se conserva el mismo ancho de vía.