Gallina como mascota
Una nueva mascota / De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
La gallina como mascota, que en su mayor parte se cría como animal doméstico, también puede criarse como mascota.[1] Cada vez más gana en popularidad,[2] particularmente entre los residentes urbanos (Neorruralismo) y los de las afueras de las ciudades. Para algunas personas, el comportamiento de estos animales, su aspecto, su tacto. su curiosidad o su tranquilidad se consideran entretenidos. Son recicladoras espectaculares de todo tipo de restos de alimentos pero básicamente comen cereales como maíz, trigo, semillas de girasol y otros muchos piensos animales. Producen huevos casi a diario. La alimentación de las gallinas es variada. Necesitan un pienso adecuado y adaptado a su edad. Hay que darles también vegetales como lechuga, acelgas, hojas de coles. No les puede faltar arena adaptada para ayudarles a hacer la digestión. Al no disponer de dientes se ayudan de los granos de arena para machacar o triturar lo que ingieren. La cáscara de ostra es un grano soluble que puede aportar calcio extra en su dieta. Las gallinas necesitan muchos elementos minerales para su plumaje y para las cáscaras de sus huevos.
Las gallinas también necesitan acceso constante a agua limpia y fresca en su gallinero y son animales con intensa vida social. En invierno, y dependiendo de las diferentes regiones climáticas del mundo hay que asegurarse de quitar el hielo del agua. Los bebederos deben ser adaptado para evitar que los polluelos puedan sumergirse y ahogarse.
Limpiar periódicamente sus dispensadores de comida, sus bebederos y sus perchas o gallineros son tareas específicas y cotidianas del cuidador.