Cerámica vidriada
De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
La cerámica vidriada (también conocida como terracota esmaltada y cerámica vitrificada o cerámica vítrea) es el producto de la cocción de una pieza de barro arcilloso enlucida o esmaltada.[1] Este proceso alfarero, denominado vitrificación (o vidriado), se consigue con un barniz a base de plomo u otras sustancias, también llamado ‘frita’, marzacotto, etc.[2]
Aunque algunas fuentes atribuyen su invención a la China del siglo III a. C., y su llegada a Occidente a la antigua Roma, hay testimonios anteriores en el Antiguo Oriente Próximo, como la fayenza egipcia (Cultura Naqada 3500-3200 a. C.), o la cerámica de Babilonia (Puerta de Ishtar, del siglo VI a. C.). El uso de cerámica vidriada para embellecer los muros se empleó en el arte islámico desde la Edad Media, dando origen a los azulejos.[3]
Esta técnica, que en su desarrollo incluye el mundo de la azulejería, se complementa con la cerámica semivitrificada, ambas a partir de la cerámica no vítrea.[4][5]