Caso Turpin
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El caso Turpin es un caso de maltrato infantil y cautiverio descubierto en Perris, California, Estados Unidos, en el que David y Louise Turpin recluyeron a sus trece hijos durante años e incluso décadas. El 14 de enero de 2018, una de las hijas de 17 años, escapó y contactó con la policía que, al entrar en la casa, encontró a algunos de los hijos en una habitación oscura y maloliente. Los trece hermanos tenían edades comprendidas entre los 2 y los 29 años, y siete de ellos tenían más de 18 años en el momento del arresto de los padres.
![Thumb image](http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/0/0e/Mugshot_of_David_Allen_Turpin.jpg)
![Thumb image](http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/c/c6/Mugshot_of_Louise_Anna_Turpin.jpg)
Los Turpin encadenaron y golpearon a sus hijos, permitiéndoles comer solo una vez al día y ducharse solo una vez al año. Según los investigadores, los mayores estaban tan desnutridos que parecían ser mucho más jóvenes. La mayor, una mujer de 29 años, pesaba solo 37 kg. Algunos de los hermanos parecían carecer del conocimiento básico del mundo, no estaban familiarizados con lo que eran la medicina y la policía.[1]
La pareja fue arrestada y detenida, pero se declararon inocentes de todos los cargos. Varios cargos legales y audiencias judiciales siguieron en los meses siguientes. El caso atrajo atención nacional e internacional; se consideró "extraordinario por numerosas razones", como el presunto abuso de ambos padres sobre varios de sus hijos (mientras que el abuso a un solo hijo es más común), y según el Dr. Bernard Gallagher, porque no siempre ocurren casos de niños que son torturados y donde el abuso parece calculado."[2]