«El buen gusto reside tanto en el conocimiento de las cosas que deben callarse como en las que deben decirse».[14]
«El celibato tiene el defecto capital de que, poniendo todas las cualidades del hombre al servicio de una sola pasión, el egoísmo, hace a los solteros inútiles y nocivos».[15]
«El dolor es una luz que nos ilumina la vida».[16] o «El dolor ennoblece incluso a las personas más vulgares».[17]
«El hombre salvaje no tiene más que sentimientos; el civilizado tiene sentimientos e ideas».[18]
«El matrimonio debe combatir sin tregua un monstruo que todo lo devora: la costumbre».[19][20]
«El matrimonio es un combate singular, antes del cual los dos esposos piden al cielo su bendición, porque amarse siempre es la más temeraria de las empresas».[21]
«En el naufragio de la embriaguez se puede observar que el único sentimiento que se mantiene a flote es el amor propio».[22]
«En la venganza el más débil es siempre el más feroz».
«En las grandes crisis el corazón se rompe o se endurece».[26][27]
«Entre los tontos el vacío se parece a la profundidad».[28]
«Es más fácil quedar bien como amante que como marido; porque es más fácil ser oportuno e ingenioso de vez en cuando que todos los días».[29]
«¿Es que se acaba de amar alguna vez? Hay gente que ha muerto y que yo siento que ama aún».[30]
«Es tan absurdo pretender que un hombre no puede amar siempre a la misma mujer, como pretender que un buen violinista no puede tocar siempre el mismo instrumento».[31][32]
«Es tan fácil soñar un libro, como difícil es hacerlo».[33]
«¿Es un signo de mediocridad ser incapaz de entusiasmarse».[34]
«Existen en nosotros varias memorias. El cuerpo y el espíritu tienen cada uno la suya».[35]
H
«Hay personas que no pueden contar con nada, ni siquiera con el azar, pues hay existencias sin azar».[36]
«Hay que dejar la vanidad a los que no tienen otra cosa que exhibir».[37][38]
«¡Hemos hecho tánta historia que a los historiadores les pasará por alto!».[39]
«Horrible condición la del hombre; no hay una sola de sus dichas que no proceda de algo que ignora».[40]
J
«Jamás en la vida encontraréis ternura mejor, más profunda, más desinteresada y más verdadera que la de vuestra madre».[41]
L
«La abnegación ennoblece aun a las personas más vulgares».[42]
«La juventud no se atreve a mirarse en el espejo de la conciencia cuando se inclina del lado de la justicia, mientras que el adulto ya se ha visto en él; ésa es la diferencia entre ambas fases de la vida».[57]
«Si todo en la sociedad como en el mundo, ha de tener un fin, es indudable que hay aquí abajo algunas existencias cuyo objeto y utilidad son inexplicables».[94]
«Sólo se estima al hombre que se estima sí mismo; sólo se respeta al hombre que se respeta a sí mismo».[95]
«Son las cualidades, y no la belleza de una mujer, lo que hace felices los matrimonios. La mujer que nos quiere sabe hacerse hermosa».[96]
T
«Todo afecto extinguido no es remplazado sino por la indiferencia o por el desprecio».[97]
«Todo poder es una conspiración permanente».[98][99]
«Todo poder humano está compuesto de tiempo y paciencia».[100]
«Todos los amantes son diestros en forjarse desdichas».[101]
U
«Una muchacha no puede encontrar nunca la felicidad de una vida novelesca, extraña a las ideas y a la educación recibida y lejos de su madre».[102]
«Un efecto esencial de la elegancia es ocultar sus medios».[103]
«Un hombre nulo es algo horrible. Pero hay otra cosa peor: un hombre anulado».[104]
«Un libro hermoso es una victoria ganada en todos los campos de batalla del pensamiento humano».[105]
«Un viajero no ve nada a fondo: su mirada resbala sobre los objetos sin penetrarlos».[106]
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«El amor conyugal, como lo concibo, reviste entonces de esperanza a la mujer, la convierte en soberana y le da una fuerza inagotable, un calor de vida que todo lo hace florecer en torno suyo. Cuanto más dueña de sí misma, más segura está de poder hacer viables el amor y la felicidad».[107]
«¡Oh, cuántas infamias se cometen para dar valor a la cosas! (...) ¿De cuántas infamias se compone un éxito?».[108]
«El siglo XIX, tal como lo conocemos, es en gran medida un invento de Balzac».[109]
«En Stendhal y en Balzac podemos oír a cada momento cómo piensa el autor sobre sus personajes y sobre lo que ocurre; especialmente en Balzac, que acompaña siempre a sus relatos de comentarios emotivos, irónicos, morales, históricos o económicos. También oímos a menudo lo que los personajes piensan y sienten, cuando el autor se identifica, puesto en una situación semejante, con el personaje».[111]
«Si se me pregunta por qué la obra de Balzac me parece inaceptable (Balzac mismo, como individuo, es un ejemplar magnífico de humanidad), responderé: porque el cuadro que me ofrece es sólo un chafarrinón».[112]
«[Las obras de Balzac] reunen una historia completa de la sociedad francesa, de la que yo, incluso en las particularidades económicas (por ejemplo, la redistribución de la propiedad real y personal después de la Revolución Francesa), he aprendido más que de todos los historiadores. economistas y estadistas profesionales».[113]
↑ En Mimesis: la realidad en la literatura, México, Fondo de Cultura Económica, 1950, pág. 457. Citado por Baquero.
↑ En «Ideas sobre la novela», 1925; en Obras completas, Madrid, Revista de Occidente, 1947, t. 3, pág. 390. Recogido po Baquero Goyanes en "Cervantes, Balzac y la voz del narrador". Atlántida: revista del pensamiento actual, Vol. I, núm. 6 (noviembre-diciembre 1963), pp. 579-596.
↑ En Marx, K. y Engels, F. Cuestiones de arte y literatura. Barcelona, Península, 1975, p. 137. Recogido por Lamo de Espinosa, en "Sociología y literatura como formas de conocimiento social". Anales de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas 2019: Año LXXI, número 96, curso académico 2018-2019,p. 90.
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Balzac, Honoré (1867). Fisiología del matrimonio, ó, Meditaciones de filosofía ecléctica sobre la felicidad y la desgracia conyugal. Libr. de Alfonso Duran.
Bartra (datos.bne). Frases y citas célebres. Grijalbo. p.25-26. ISBN8425315263.
Giner (José Luis Díaz y Vicente González 1967). Gran enciclopedia de frases célebres. Ediciones Giner. M.2003-1967.
Mackay, Alan L. Diccionario de citas científicas: la cosecha de una mirada serena.Ediciones de la Torre, 1992. ISBN 9788479600242.
Ortega, Arturo. El gran libro de las frases célebres. Penguin Random House Grupo Editorial. México, 2013. ISBN 6073116314, 9786073116312. (En Google Books.)