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Erotica se publicó el 20 de octubre de 1992 por el sello discográfico Maverick Records.[2] Fue el primer álbum de Madonna en llevar la etiqueta de Parental Advisory y fue prohibido en varios países asiáticos, como China y Singapur.[3][4] El 22 de octubre de 1992, dos días después del lanzamiento, MTV emitió un mini-documental llamado The Day In Madonna que mostraba la publicación simultánea del libro Sex y de Erotica.[5] La cantante también apareció en la portada la revista Vogue.[6] En enero de 1993, Madonna se presentó en el late show estadounidense Saturday Night Live e interpretó «Fever» y «Bad Girl». Tras finalizar esta última, rompió una fotografía de Joey Buttafuoco diciendo a la audiencia: Fight the real enemy! («¡Luchemos contra el verdadero enemigo!»). Esta acción fue una respuesta a Sinéad O'Connor, que meses antes había hecho lo mismo con una fotografía de Juan Pablo II.[7] Durante su visita al milésimo programa de The Arsenio Hall Show en mayo, presentó «Fever» en su versión original; para la actuación, se acompañó de una una banda, usó un vestido negro y fumó un cigarrillo.[8] Seguido de esto, cantó «The Lady Is a Tramp» con Anthony Kiedis, vocalista de la banda Red Hot Chili Peppers.[8] El 2 de septiembre de 1993, Madonna abrió la ceremonia de los MTV Video Music Awards 1993 interpretando «Bye Bye Baby».[9]
La promoción de Erotica continuó con su cuarta gira de conciertos, The Girlie Show World Tour, la cual visitó Europa, Asia, América del Norte, América del Sur y Australia.[10] Fue descrita como «una reivindicación del cabaret, el burlesque, la música negra, el circo y el disco».[11] No obstante, al igual que sus anteriores giras, esta causó polémica; la intérprete abría el concierto vestida como una dominatrix, rodeada de bailarines semidesnudos de ambos sexos.[12] En Puerto Rico, causó gran controversia al frotar la bandera de la isla entre sus piernas durante el concierto, y los judíos ortodoxos se manifestaron para pedir la cancelación de su presentación en Tel Aviv, Israel, aunque sus protestas no surtieron efecto.[13] A pesar de la controversia, The Girlie Show obtuvo buenas críticas; Sam Buckley, un periodista de la revista Time, comentó: «Madonna, antes una prostituta Harlow y ahora un alegre arlequín, es la mejor [artista] en la Tierra».[14] Además, logró recaudar 70 millones USD de 39 conciertos.[15] Dos especiales de televisión diferentes fueron transmitidos en 1993; Madonna Live in Japan: The Girlie Show, únicamente en Japón, y Madonna Live Down Under: The Girlie Show, emitido en HBO y puesto a la venta en 1994 como un álbum en vídeo.[16]
El primer sencillo del álbum, «Erotica», se publicó en octubre de 1992 y recibió críticas positivas por parte de la prensa, aunque fue comparado con el sencillo anterior de Madonna, «Justify My Love» (1990).[17][18] Obtuvo una buena recepción comercial al alcanzar la tercera posición de la lista Billboard Hot 100 y el top diez en Australia, Irlanda, Nueva Zelanda, Noruega y el Reino Unido.[19][20][21][22][23][24] Tras su lanzamiento, la cantante libanesa Fairuz reclamó que su voz aparecía en la canción sin su consentimiento, y dijo que la letra «He crucified me today» —cantada en árabe— se tomó de un cántico religioso que tradicionalmente se canta durante los servicios de la Pascua.[25] El vídeo musical de la canción mostraba imágenes sexualmente cargadas —rodadas durante las sesiones del libro Sex— diseñadas para sorprender al público. Tras su estreno, MTV lo emitió solo tres veces después de la medianoche, antes de prohibirlo permanentemente.[26][27] «Deeper and Deeper» se publicó el 17 de noviembre; los críticos elogiaron su sonido disco y lo llamaron uno de los más «subestimados» de la carrera de Madonna.[17][18] Consiguió entrar a las diez primeras posiciones de las listas de Bélgica, Irlanda, el Reino Unido y Estados Unidos.[28][24][21][19] «Bad Girl» se lanzó como el tercer sencillo del álbum el 22 de febrero de 1993. Tuvo un éxito comercial moderado, pues apenas alcanzó el top diez del Reino Unido y la posición 36 del Billboard Hot 100.[24][19] Los críticos lo llamaron «cautivante».[18]
«Fever» se publicó como el cuarto sencillo de Erotica únicamente en Europa y Australia. La versión logró una recepción comercial favorable, pues llegó a las diez primeras posiciones de las listas del Reino Unido e Irlanda, así como a la primera posición en Finlandia.[21][24][29] En los Estados Unidos, a pesar de no contar con un lanzamiento oficial, alcanzó la primera posición de la lista Dance Club Songs de Billboard.[30] Sin embargo, obtuvo reseñas variadas por parte de la prensa; por ejemplo, Joel Lynch de Billboard la llamó «distante [y] fría» mientras que J. D. Considine, de The Baltimore Sun, dijo que era una «actualización atrevida» de la original y elogió su producción.[31][32] El quinto sencillo, «Rain», se publicó en julio de 1993. Descrito por los críticos como una metáfora extendida de la eyaculación, lo señalaron como uno de los mejores trabajos de Madonna.[17][33] Alcanzó la catorceava posición del Hot 100 y los diez primeros puestos en el Reino Unido, Irlanda, Italia, Canadá y Australia.[19][24][21][34][35][36] «Bye Bye Baby» se publicó como el último sencillo del álbum en noviembre de 1993. En términos generales, obtuvo reseñas variadas de los críticos musicales: por un lado, quedaron conformes con el resultado, pero otros criticaron su voz.[17][18] Desde el punto de vista comercial, alcanzó un recibimiento bajo, pues solo llegó al top diez en Italia, en la séptima posición.[34] Asimismo, logró ubicarse en los números 15, 23 y 48 en Australia, Suiza y Nueva Zelanda, respectivamente.[37][38][39]
Calificaciones | |
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Fuente | Calificación |
Allmusic | [33] |
Entertainment Weekly | (C+)[40] |
Rolling Stone | [18] |
Rolling Stone | Positiva[41] |
Robert Christgau | (A)[42] |
Slant Magazine | [17] |
The New York Times | Variada[43] |
The Baltimore Sun | Positiva[32] |
Yahoo! Music | Positiva[44] |
Stylus Magazine | Positiva[45] |
Jenesaispop | [46] |
Tras su lanzamiento, Erotica recibió reseñas generalmente positivas por parte de la prensa. J. Randy Taraborrelli, en su biografía de la cantante, dijo que «musicalmente, [Erotica] era un crisol de música urbana de los años noventa - hip hop y house mezclado con R&B [...] El disco más promiscuo de Madonna».[47] La autora Lucy O'Brien, en su libro Madonna: Like an Icon, explicó que se trataba de «una desviación extrema de sus trabajos anteriores, Erotica mostró a Madonna virando hacia una dirección más oscura y experimental». Concluyó que se trataba de su trabajo «más valiente y más personal».[48] Escribiendo para Rolling Stone, Arion Berger elogió su sonido «frío y remoto», y escribió que «es todo lo que se le acusa [a Madonna] de ser — meticuloso, calculado, dominante y artificial. [Ella] Acepta los cargos y responde con un álbum brillante para probarlo».[18] Escribiendo para Billboard, Paul Verna declaró: «No dejes que su título te engañe, [Erotica] es su lanzamiento más variado y desafiantemente creativo a la fecha».[41] Joel Lynch, de la misma publicación, sostuvo que «muestra la creciente disposición de Madonna para ampliar sus horizontes en términos de temas y técnicas de estudio».[49] Peter Buckley, autor de The Rough Guide to Rock, opinó que se trataba de un disco «bastante bueno, aunque un poco repetitivo en cuanto a temática».[50] Stephen Thomas Erlewine de Allmusic lo llamó «ambicioso» y uno de los mejores y más completos trabajos de la intérprete.[33] Phil Sutcliffe, de la revista Q, le dio tres estrellas de cinco en su reseña y redactó: «La mayor sorpresa es "Deeper and Deeper", que puede ser confundido con un tributo a Kylie. Sin embargo, la sustancia de Erotica reside en un rango de canciones directas, casi íntimas, basadas no en la idea del sexo, sino en la experiencia de otras relaciones».[51]
Para Stephen Sears, del portal Idolator, se trata del disco más rococó de Madonna y elogió sus «sonidos extraños y sentimientos oscuros».[52] El crítico musical y periodista Robert Christgau le otorgó una «A» y declaró que «[Madonna] no tiene una gran voz, porque no la necesita (para esta ocasión). Tiene todo el control [...] Las letras [en Erotica] no son tontas».[42] Charles Aaron de Spin, lo elogió por ser un «valiente e irreprochable comentario valiente sobre la fría y trágica indiferencia del sexo en tiempos del SIDA».[53] Alfred Soto, de Stylus Magazine, destacó que «cada pista emite su propia energía idiosincrásica; hay más texturas inesperadas en Erotica que en cualquier otro álbum de Madonna [...] Desafortunadamente, demostró ser demasiado sofisticado para una sociedad mainstream dominada por The Bodyguard».[45] Tony Power, de Blender, concluyó: «Que las solistas (a excepción de Millie Jackson) nunca hayan hecho algo tan fuerte, hace de Erotica algo increíble y, también, excitante».[54] El editor de Yahoo! Music John Myers, afirmó que musicalmente era uno de los mejores trabajo de Madonna, y que ofrece «una mirada inteligente a los tabúes a los que la gente aprendió a tener miedo de hablar, combinado con arreglos musicales igualmente astutos».[44] J. D. Considine de The Baltimore Sun declaró que lo más sorprendente de las canciones es que en ellas Madonna canta de amor, no de sexo.[32] La revista mexicana Expansión opinó que el álbum mostraba a la cantante «desnuda por dentro y por fuera», citando a «Rain», «Deeper and Deeper» y «Why's it So Hard» como los mejores temas.[55]
Sebas E. Alonso, del sitio web español Jenesaispop, opinó que «la producción es elegante y aguanta el paso del tiempo con dignidad, convirtiéndose, no sabría decir en qué momento, en un disco de culto para todos sus fans», aunque criticó la duración de algunas de las canciones.[46] Sergio del Amo, del mismo sitio, dijo que se trataba de una «obra incomprendida», y sostuvo que «por el simple hecho de lanzar el tema homónimo como primer single hay que respetar este disco tan arriesgado».[56] Alejandra Torrales, del sitio web mexicano Sopitas, sostuvo que era uno de los mejores discos de Madonna; «[Erotica] es una verdadera joya en cuanto a tendencias musicales se refiere [...] si lo escuchas de principio a fin, te lleva por un viaje súper relajado y sensual gracias a los ritmos electroacústicos, con percusiones parecidas a goteos de agua y pequeños tintineos».[57] Ignacio Gomar de El País lo llamó «oscuro, casi underground, con letras agresivas interpretadas por Madonna casi recitando entre susurros e incluso coqueteando con el hip hop y con el jazz».[58] En una crítica más variada, Sal Cinquemani de Slant Magazine reconoció que «el ritmo de Pettibone puede ser anticuado con el sonido de un género que gobernó una década de artistas de un solo éxito antes de ser reemplazado por el hip-hop comercializado», pero clasificó la voz de Madonna como «nasal y remota».[17] Una reseña negativa provino de David Browne, de Entertainment Weekly, quien le dió una calificación de C+ y lo llamó «posiblemente, la música dance más deprimente que jamás se haya hecho».[40] También negativo fue Stephen Holden de The New York Times, pues declaró que Erotica no estaba entre los mejores álbum de Madonna, ya que muchas de sus canciones «carecen de la amplitud musical y agilidad confesional de Like a Prayer, el disco que la estableció como una cantautora pop eficiente y madura».[43]
En los Estados Unidos, Erotica debutó en el número dos de la lista Billboard 200 el 11 de noviembre de 1992, con 167 000 copias vendidas en su primera semana.[59][60] La semana siguiente, el álbum cayó a la cuarta posición.[61] Posteriormente fue certificado con un doble disco de platino por la Recording Industry Association of America (RIAA) por distribuir más de dos millones de unidades.[62][63] De acuerdo al Nielsen SoundScan, para diciembre de 2016 se habían vendido más de 1.91 millones ejemplares en los Estados Unidos, con 79 000 adicionales vendidos a través de los clubes de música de la empresa BMG.[64][65] En Canadá, debutó en la séptima posición de la lista de RPM el 7 de noviembre de 1992 y, dos semanas después, alcanzó la cuarta posición. Permaneció en la lista un total de 38 semanas, y fue certificado con dos discos de platino por parte de Music Canada (MC) tras haber distribuido más de 200 000 copias.[66][67][68]
En Australia también debutó en la primera posición del Kent Music Report, y recibió un triple disco de platino por parte de la Australian Recording Industry Association (ARIA) tras comercializar más de 210 000 copias.[69][70] En Nueva Zelanda también alcanzó el top cinco de la lista, mientras que en Japón fue certificado doble platino por la Recording Industry Association of Japan (RIAJ).[71][72] En el Reino Unido, Erotica debutó en la segunda posición del UK Albums Chart el 24 de octubre de 1992, y permaneció en esta posición por tres semanas, y un total de 38 semanas dentro de la lista.[24] El 1 de junio de 1993, recibió un doble disco de platino por parte de la British Phonographic Industry (BPI) por la distribución de más de 600 000 ejemplares.[73] En Francia, el álbum debutó en el primer puesto de listas el 28 de octubre de 1992, y permaneció en esa posición por dos semanas; ha vendido un total de 250 000 copias en dicho país.[74] En Alemania tuvo un desempeño similar recibió un disco de oro por distribuir más de más de 250 000 copias.[75][76] En Suecia, Erotica debutó en la sexta posición, y estuvo sólo siete semanas dentro de la lista principal.[77] De manera similar, llegó al número cinco de las listas suizas el 25 de octubre de 1992, y posteriormente recibió un disco de oro por parte de la Bundesverband Musikindustrie.[78] [79] También recibió un disco de platino en España y un disco de oro en Brasil.[80][81] En total, Erotica ha vendido más de seis millones de copias a nivel mundial.[82][83]
En 1992, Madonna era un ícono —intocable, literal y figurativamente— y Erotica fue la primera vez que su música tomó un tono decididamente combativo, incluso amenazante, y la mayoría de la gente no quiso escucharlo. La irrefutable asensualidad de Erotica probablemente dice más sobre la mentalidad «sexo=muerte» de principios de los años 1990, que cualquier otro documento musical de la época. Esta no es Madonna en su cenit creativo. Esta es Madonna en su punto más importante, más relevante. Nadie más en la cultura popular de aquella época se atrevió a hablar de sexo, amor y muerte con tal franqueza y valentía. —Sal Cinquemani de Slant Magazine hablando sobre el impacto de Erotica.[17] |
El Salón de la Fama del Rock and Roll lo consideró uno de los álbumes más revolucionarios de todos los tiempos, declarando que «pocas artistas, antes o después de Erotica, han sido tan francas acerca de sus fantasías y deseos. [Madonna] dejó claro que la vergüenza y la sexualidad se excluyen mutuamente [...] abrazó y defendió el placer, y se mantuvo a la vanguardia de la revolución sexual del pop».[84] Escribiendo para Entertainment Weekly, Miles Raymer dijo que era «en retrospectiva, su álbum más fuerte; producido en la cima de su poder y provocación, [Erotica] ayudó a elevarla de mera estrella pop a ícono que definió una era».[85] Joel Lynch de Billboard, declaró que: «Si sus trabajos anteriores fueron una invitación a celebrar la sexualidad sin vergüenza, Erotica fue un desafío – por parte de Dita Parlo, la implacable personalidad dominatrix de Madonna – para presenciar, y quizás incluso disfrutar, de los tabúes sexuales de la sociedad. En el pasado, [Madonna] ya había hablado sobre la mirada masculina, pero aquí no solo devolvió la mirada, sino que convirtió al mundo entero en su sub [...] Erotica ocupa un lugar crucial en el panteón del pop, estableciendo un plan de acción para las décadas venideras para que los cantantes sean francos rehuyendo de la explotación».[49] Según J. Randy Taraborrelli, tras el lanzamiento del álbum «gran parte de la sociedad parecía reexaminar su sexualidad».[86] Daryl Deino del portal Inquisitr lo llamó «un momento revolucionario para el feminismo».[87]
Para Stephen Sears de Idolator, se trató de un «desafío al pop tradicional» que marcó su periodo «más oscuro y más profundo».[52] Sergio del Amo, del portal español Jenesaispop, dijo que su «concepto lascivo (y ya no digamos en el libro de fotografías ‘Sex’) fue del todo pionero para la historia del pop».[56] Bianca Gracie, del canal de televisión Fuse, se refirió a Erotica como «el álbum que cambió el mundo de la música pop para siempre [...] uno de los más polémicos y definitorios en la historia del pop».[88] Barry Walters de Rolling Stone notó que la mayor contribución del álbum fue que «abrazó lo "otro", que en este caso fue lo queer, la cultura afroestadounidense, feminismo de tercera ola, el exhibicionismo y las perversiones. [Madonna] tomó lo que estaba marginado durante la peor epidemia de SIDA, lo colocó en un contexto emancipado y lo introdujo para ser visto y escuchado por todos».[83] En su libro Striptease Culture: Sex, Media and the Democratization of Desire, Brian McNair escribió que tras el lanzamiento del álbum empezaron a surgir libros académicos sobre el «fenómeno Madonna», mientras que grupos feministas «pro y anti-porno» hicieron de ella «un símbolo de todo lo bueno o malo (según su punto de vista) de la cultura sexual contemporánea». [89] Escribiendo para la revista colombiana Shock, José Plata sostuvo que el álbum mostró «un antes y un después no solo musicalmente, también en sus decisiones empresariales».[90] Con Erotica y la compañía de entretenimiento Maverick, «el mundo conoció a la Madonna que estaba lista para ofrecerle al mundo algo más que una imagen enfocada al pop. Era el pop hecho lascivia y mercado, Porque si, el sexo vende y que [ella] lo tuviera presente en su obra, era un sello de garantía».[90] Ignacio Gomar de El País declaró que «Erotica y sobre todo [el libro] Sex alejaron a buena parte del público. [Madonna] pasó de ser una diva para todos a una artista más experimental y solo para adultos. Concretamente los adultos más liberales, y dentro de éstos el colectivo LGTB».[58]
Taraborrelli comentó que es lamentable que Erotica esté «históricamente vinculado a momentos desfavorables» en la carrera de Madonna; sostuvo que debe ser reconocido por sus propios méritos, no sólo como algo relacionado a los otros dos proyectos más explícitos de la artista (el libro Sex y la película Body of Evidence), ya que «tiene un verdadero valor».[93] Cuando se le preguntó cuál había sido su mayor decepción profesional, Madonna respondió: «El hecho de que mi álbum Erotica se pasara por alto a causa del libro Sex [...] Eso me decepcionó, pero no estoy decepcionada con el disco en sí [...] cada crítica de la película o del álbum fue realmente una reseña del libro. Era obvio, ni siquiera estaban hablando de las canciones o de la música [...] fue una pena, pero lo entendí».[93] McNair observó que la cantante tomó un riesgo financiero con el álbum y que no fue hasta el lanzamiento de su séptimo álbum de estudio, Ray of Light (1998), que sus ventas e ingresos regresaron a niveles «pre-Erotica».[89] Federico del Val de Indie Hoy, comentó que este lanzamiento supuso «tal vez el único momento en el que [Madonna] no actuó en función de su figura de icono o de producto de consumo masivo, convirtiéndose por primera vez en una artista totalmente entregada a un concepto audaz que reivindica el derecho al deseo y el hedonismo durante los años mas oscuros para la diversidad».[94]
El músico Doug Wimbish señaló que era un disco «adelantado a su tiempo [...] Madonna fue lo suficientemente artista para tomar los tonos y matices de lo que estaba pasando y poner un concepto junto. No fue sólo intentar hacer un disco [...] Tenía Maverick, había hecho el libro, la película Dick Tracy, salió con un actor de renombre de Hollywood [Warren Beatty]. Este fue su primer disco con su concepto. Sólo que asustó a todo el mundo. Puso el sistema boca abajo por un momento, y [la sociedad] tuvo que enfrentarlo».[95] Wimbish también opinó que la cantante forjó un camino para la próxima generación de artistas pop: «impuso su punto de vista como mujer, y lo llevó a primera plana en serio. Eso estableció la plantilla para todas las Christinas, Britneys y Beyoncés».[95]
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