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diario peruano De Wikipedia, la enciclopedia libre
Diario Expreso es un periódico peruano de circulación nacional que se edita en Lima. Fundado en 1961, se cuenta entre los diarios de mayor circulación del Perú.[1] El diario se caracteriza por su orientación política de derecha. Obtuvo notoriedad por su posición oficialista durante el gobierno de Alberto Fujimori[2][3][4] y opositora en el gobierno de Pedro Castillo.[5]
Diario Expreso | ||
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Tipo | Diario | |
Formato | Berlinés | |
País | Perú | |
Sede | C/ Luis Carranza n.º 2280, Cercado de Lima, Lima | |
Ámbito de distribución | Nacional | |
Fundación | 24 de octubre de 1961 (62 años) | |
Fundador(a) | Manuel Mujica Gallo | |
Postura política | derecha | |
Ideología política |
Neoliberalismo Anticomunismo Conservadurismo Conservadurismo social | |
Idioma | Español | |
Precio | S/ 1.50 | |
Director(a) | Antonio Ramírez Pando | |
ISSN | 1605-3117 | |
Sitio web | www.expreso.com.pe | |
Fue fundado el 24 de octubre de 1961 por Manuel Mujica Gallo, rico propietario vinculado al negocio de la banca y seguros.[6] Que al efecto constituyó la empresa Periodística Perú S. A. En esta primera etapa, tuvo como jefes de redacción a Manuel Jesús Orbegoso, Raúl Villarán, José Antonio Encinas de Pando, entre otros.[7][8]
En 1965, fue adquirido por Manuel Ulloa Elías, que para el caso fundó la Editora Nacional S. A. La misma empresa editó el vespertino Extra. En esta nueva etapa, tuvo por jefes de redacción a Efraín Ruiz Caro y Guillermo Cortez Núñez. Entre sus colaboradores figuraron Ciro Alegría, Carlos Cueto Fernandini, Manuel Mujica Gallo y Mario Vargas Llosa. Se editaba también un suplemento dominical titulado Estampas; y como un aporte a la educación, el suplemento El escolar.[9]
Con la ascensión de un Gobierno militar en 1968, empezaron las dificultades. El 31 de octubre de ese año, Expreso y Extra fueron clausurados por orden del régimen del general Juan Velasco Alvarado. No obstante, una protesta de la Federación de Periodistas del Perú obligó al Gobierno a permitir la reapertura de los diarios.[10]
El 2 de enero de 1970, renunció Manuel Ulloa a la presidencia del directorio de Editora Nacional S. A. debido a que un decreto ley del Gobierno impedía ejercer tal función a quienes residieran más de seis meses fuera del país.[9] Ulloa, que había sido un importante ministro del derrocado Gobierno belaundista, optó por no volver al Perú. Al considerar que se había desatado en su contra una persecución política.[11]
El 4 de marzo de 1970, Expreso y Extra fueron prácticamente expropiados por el Gobierno militar, con la excusa de entregar su administración a sus propios empleados y trabajadores, organizados en cooperativas. Sin embargo, personas ajenas a los diarios tomaron el control de los mismos.[12] En esta etapa de expropiación, ejercieron como directores de Expreso: Alberto Ruiz Eldredge, Leopoldo Chiappo y Juan José Vega, todos nombrados por el Gobierno.[7] Tiempo después, Velasco explicó que había entregado los diarios a los comunistas para que le sirvieran de «mastines» (perros de presa) en su lucha contra la oligarquía.[10]
Finalizado el Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas el 28 de julio de 1980, Expreso y Extra retornaron a sus propietarios, y Manuel Ulloa asumió nuevamente como presidente del directorio de Editora Nacional S. A. El primer director de Expreso, en esta nueva etapa, fue Guillermo Cortez Núñez (1980-1988), que fue sucedido por Manuel D'Ornellas (1988-1998). Contaba entonces con un prestigiado equipo de periodistas, entre los que destacaban Jaime de Althaus, Jorge Morelli, Uri Ben Schmuel y Patricio Ricketts.[9]
Durante el gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000), los directivos del diario estuvieron comprometidos en vender su línea editorial a los intereses del régimen.[13] Tras la caída del Fujimori, se ordenó el encarcelamiento del director del diario, Eduardo Calmell del Solar Díaz, acusado de haber recibido, junto con Vicente Silva Checa (director de Cable Canal de Noticias), más de US$3 000 000 de manos del asesor presidencial Vladimiro Montesinos.[14][15]
En 2002, entró en funciones una nueva organización bajo la dirección de Luis García Miró, cuyo objetivo era recuperar el prestigio del diario.
Para 2024, el director es Antonio Ramírez Pando.[16]
En los últimos años del fujimorato, el diario adoptó una línea editorial abiertamente crítica contra la oposición política a Fujimori y sus aliados.[17] Expreso fue miembro del Consejo de la Prensa Peruana (CPP) desde su fundación en 1997 hasta el año 2000, cuando la organización renunció a su membresía supuestamente por discrepancias políticas.[18] El entonces director, Luis García Miró, expresó en una columna de opinión en 2020 de que la creación de la CPP era una «antítesis» y que su existencia no contribuyó en nada al periodismo en el Perú.[19]
En 2001, el diario Expreso cambió de propietario[20] y su línea editorial pasó a ser ultraconservadora y defensora del legado neoliberal del fujimoriato.[21] Tanto Expreso como La Razón (no confundir con el diario del mismo nombre propiedad del APRA) atacaban a figuras cercanas a la izquierda. Ambos diarios tildaron a la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) de «caviar».[22] En contraste, el diario La República y la revista Caretas, apoyaron la difusión de los estudios realizados por la CVR.[23] En 2007, Expreso recurrió al terruqueo en su portada para atacar a la CVR nuevamente, esta vez coincidiendo con el cuarto aniversario del Informe final,[24] al referirse a uno de sus monumentos, El ojo que llora, como un símbolo del terrorismo.[25][26] Ambos diarios, Expreso y La Razón, han mantenido su postura crítica, manifestando inquietud sobre potenciales perjuicios a la imagen de masculinidad de las fuerzas armadas.[27]
Además, Expreso llegó a acusar a La República de presuntamente tener una cobertura favorable al expresidente Alejandro Toledo, argumentando que «[este y otros] medios [...] venden (su editorial) [de la misma forma] como hizo [su director] Gustavo Mohme entregándole sus páginas al actual gobierno».[28] En 2013, Expreso se vio obligado a disculparse con Toledo,[29] tras acusarlo en un artículo lleno insultos de ser «"aliado" del gobierno de Ollanta Humala».[30]
En 2005 el 35° Juzgado Penal de Lima prohibió a Expreso de atribuir a Diego García Sayán, exministro de Toledo y posteriormente integrante de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en sus informes, luego de realizarse una querella en su contra.[31] El Instituto de Prensa y Sociedad alertó de una eventual «censura».[32]
Por otro lado, Paola Ugaz, una de las afectadas en la campaña mediática apoyada por el canal Willax por investigar el caso Sodalicio,[33] quien apareció en al menos tres portadas,[34] propuso en 2020 demandar al periódico por aparentemente emprender una campaña de difamación por supuesto lavado de activos.[35] Al año siguiente, la Fiscalía identificó a Uri Ben Schmuel como presunto autor de las notas periodísticas contra Ugaz.[36] En 2022 el Poder Judicial absolvió a Ugaz luego de que un demandante sustentó al diario Expreso para tomar acciones legales.[37]
Video externo | ||
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Videoanálisis de Pedro Salinas acerca de la editorial del diario Expreso, «Prensa embarrada». Esta editorial aborda las declaraciones de Jaime Villanueva, en el marco del escándalo de corrupción en el Ministerio Público del Perú, y atribuye la presencia de la «mafia caviar» (24:00-24:40, 30:46-31:11). Publicado por La Mula TV en mayo de 2024. | ||
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El diario mantuvo campañas editoriales contra Pedro Castillo y su círculo. En el año 2023, Gustavo Gorriti acusó al diario y a Willax de realizar una campaña contra periodistas de IDL-Reporteros y otros periodistas independientes.[38] No obstante, en el año 2024, el director y el editor del periódico fueron sentenciados por difamar, en su portada de 2019,[39] a la exministra de Martín Vizcarra, Fiorella Molinelli, a partir de especulaciones presentadas por Édgar Alarcón.[40]
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