Escándalo de datos de Facebook-Cambridge Analytica
escándalo relacionado con el uso no consentido de información personal en Facebook para publicidad política / De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
En la década de 2010, la consultora británica Cambridge Analytica recopiló datos de millones de usuarios de Facebook sin su consentimiento, principalmente para utilizarlos con un fin de propaganda política.[1]
Los datos se obtuvieron por medio de una aplicación llamada This Is Your Digital Life («Esta es tu vida digital»), desarrollada por el informático Aleksandr Kogan y su empresa Global Science Research en 2013.[2] La aplicación consistía en una serie de preguntas para elaborar perfiles psicológicos de usuarios, y recabó los datos personales de los contactos de sus usuarios mediante la plataforma Open Graph de Facebook.[2] La aplicación recopiló datos de hasta 87 millones de perfiles de Facebook, y Cambridge Analytica los utilizó para proporcionar asistencia analítica a las campañas de Ted Cruz y Donald Trump para las elecciones presidenciales de 2016.[3][4] Cambridge Analytica también fue acusada de interferir en el referéndum del Brexit, si bien la investigación oficial reconoció que la empresa no intervino «más allá de ciertas indagaciones iniciales» y que no se habían producido «infracciones significativas».[5][6]
La información sobre el mal uso de los datos se conoció gracias a Christopher Wylie, antiguo empleado de Cambridge Analytica, en entrevistas con The Guardian y The New York Times.[7] En respuesta, Facebook se disculpó por su papel en la recolección de datos, y su director ejecutivo, Mark Zuckerberg, tuvo que testificar ante el Congreso de los Estados Unidos.[7] En julio de 2019 se anunció que la Comisión Federal de Comercio imponía a Facebook una multa de 5000 millones de dólares por sus violaciones de la privacidad.[8] En octubre de 2019, Facebook aceptó pagar una multa de 500 000 £ a la Oficina del Comisionado de Información del Reino Unido por exponer los datos de sus usuarios a un «serio riesgo de daño».[9] En mayo de 2018, Cambridge Analytica se declaró en quiebra en EE. UU.[10]
Otras agencias de publicidad llevan años implementado distintas formas de seguimiento psicológico, y Facebook patentó una tecnología similar en 2012.[11] No obstante, la sinceridad de Cambridge Analytica sobre sus métodos y el calibre de sus clientes —como la campaña presidencial de Trump y la campaña a favor del Brexit— concienciaron a la opinión pública de los problemas que plantea el seguimiento psicológico, una cuestión sobre la que los estudiosos llevan años advirtiendo.[11] El escándalo provocó un creciente interés público en la privacidad y en la influencia de los medios sociales en la política. En Twitter se hizo tendencia el movimiento «#DeleteFacebook» («Borra Facebook»).[12]