![cover image](https://wikiwandv2-19431.kxcdn.com/_next/image?url=https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/f/f4/Mwamongu_water_source.jpg/640px-Mwamongu_water_source.jpg&w=640&q=50)
Escasez de agua en África
panorama general de la escasez de agua en África / De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
Se pronostica que la escasez de agua en África alcanzará niveles peligrosamente altos para 2025. Se estima que alrededor de dos tercios de la población mundial podría sufrir escasez de agua dulce para 2025. Las principales causas de la escasez de agua en África son la escasez física y económica, el rápido crecimiento demográfico y el cambio climático. La escasez de agua es la falta de recursos de agua dulce para satisfacer la demanda estándar de agua.[1] Aunque el África subsahariana tiene un suministro abundante de agua de lluvia, es estacional y se distribuye de manera desigual, lo que provoca inundaciones y sequías frecuentes.[2] Además, los problemas predominantes de desarrollo económico y pobreza, combinados con el rápido crecimiento de la población y la migración rural-urbana, han convertido al África subsahariana en la región más pobre y menos desarrollada del mundo.[2]
![Thumb image](http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/f/f4/Mwamongu_water_source.jpg/640px-Mwamongu_water_source.jpg)
El informe de 2012 de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación indica que la creciente escasez de agua es ahora uno de los principales desafíos para el desarrollo sostenible.[3] Esto se debe a que un número creciente de cuencas fluviales han llegado a condiciones de escasez de agua por la demanda combinada de la agricultura y otros sectores. Los impactos de la escasez de agua en África van desde la salud (las mujeres y los niños se ven particularmente afectados) hasta la educación, la productividad agrícola, el desarrollo sostenible y el potencial de más conflictos por el agua.
Para abordar adecuadamente el problema de la escasez de agua en África, la Comisión Económica de las Naciones Unidas para África enfatiza la necesidad de invertir en el desarrollo de los recursos hídricos potenciales de África para reducir el sufrimiento innecesario, garantizar la seguridad alimentaria y proteger las ganancias económicas mediante la gestión eficaz de sequías, inundaciones y la desertificación.[4] Los esfuerzos continuos para lograr esto incluyen un énfasis en implementaciones de infraestructura y mejoras de pozos, sistemas de captación de agua de lluvia y tanques de almacenamiento de agua limpia.