Neoliberalismo en el Perú
situación de la corriente neoliberal en el Perú / De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
El neoliberalismo en el Perú (referido también como «neoliberalismo criollo»)[1][2] corresponde a una serie de políticas de tal ideología aplicadas en ese país desde los años 1980,[3][4] que tuvieron su punto de inflexión con el Fujishock de los años 1990, luego de las propuestas económicas recibidas desde Washington hacia América Latina. Su documento referente es la constitución de 1993, que llevó rasgos libertarios.[5] Se manifiesta como un gobierno mayormente empresarial, generadora de bienes, en contraste con otros países de América Latina.[6] Esta manifestación ganó relevancia cuando el país alcanzó mayor crecimiento económico durante el auge de las materias primas entre 2003 y 2013.[7]
Impulsada por Hernando de Soto, principal responsable de dotar una ideología política a los ejecutivos del país en los años 1980,[8] es una de las corrientes que permaneció vigente en esa región, debido a que no ha sido cuestionada.[9] Cuenta el respaldo del Banco Interamericano de Desarrollo (en el conocido consenso de Washington),[10] empresas transnacionales,[11] y parte de la clase media. Como resultado, se ha consolidado una élite económica con control sobre los sectores financieros, exportadores y de comunicaciones, factores determinantes en el Consenso de Lima.[12]
A pesar de su nombre, la corriente del neoliberalismo llevó posturas conservadoras, al menos cuando asumió Alberto Fujimori, por lo que se diferencia con las liberales del siglo XXI por oponerse a una democracia plena.[13][14][15][16] Sus partidarios promueven medidas económicas como la desregulación y la privatización, incluyendo la eliminación de los programas sociales.[17] Dicho modelo proporcionó al país en alcanzar la estabilidad económica a costas de una desigualdad social;[18][19] con una restricción evidente de la expresión en los sectores populares, que incluye a los indígenas.[20]